Ruta realizada el día 10 de Diciembre del 2016.
Fuimos Montse, Espino Pilar, Conchi, Mª José, Paco, Eugenio, Juan José, Pepe y yo, Antonio, a realizar un recorrido por una Sierra colmatada de castaños con sus hojas de color ocre y amarillo, en estas fechas y muchas, ya en el suelo tapizándolo.
Procedentes de Ronda y dirección hacia San Pedro de Alcántara, tomamos el desvío hacia Cartajima y Parauta. Una vez en la entrada del pueblo y junto a la fuente de la Alquería, dejamos los vehículos.
Con mochilas a la espalda y botas de montaña en los pies, dimos inicio a esta excursión, sabiendo que se trataría de subidas y bajadas alternas, bajo un entorno de tonos cálidos muy sugerentes en este periodo otoñal.
Partimos desde las primeras casas de la población, tomando dirección Sur por el Camino de Igualeja, siguiendo el cartel indicativo que mostraba el tiempo estimado para llegar a Igualeja de 1,30 h, por PR-A 226.
Un ancho camino que pasaba por diferentes fincas delimitadas por vallas metálicas y una gran cantidad de castaños sin sus hojas en las ramas, tiradas en el suelo y otras depositadas sobre los vallados, formando un curioso y denso muro de pequeña altura.
Observamos perfectamente el cercano pueblo de Cartajima con sus Riscos al fondo, pasamos algunos alcornoques y a continuación, el camino tomó una enorme inclinación hacia el fondo del valle, realizando diversas eses, para mitigar la pendiente.
El camino nos llevó al cauce del arroyo de los Granados que tuvimos que vadear usando algunas piedras y un tronco que nos vino estupendo para la ocasión.
Ahora tocaba subir, ascender a la Loma de Igualeja, por senderos perfectamente marcados y entre grandes y viejos castaños, pasamos la zona del Chaparral y un acusado barranco mediante un puente que lo salvaba. De nuevo, obtuvimos preciosas vistas del pueblo de Cartajima.
La senda, que a medida que se acercaba a la Loma, se iba ensanchando y convirtiéndose en amplio camino estaba completamente cubierta por hojas secas de los castaños que hacían de una espontánea alfombra.
Justo en la divisoria de la Loma cruzamos el Camino de Halda, e iniciamos seguidamente el segundo descenso hacia el pueblo de Igualeja. Principalmente entre castaños y algunos campos de labor.
Poco a poco, nos fuimos acercando a las viviendas del pueblo de Igualeja, entrando a la población por la calle de la Tetona.
Nos entretuvimos escudriñando sus calles, plazas, fuentes, incluso algunas cervecitas cayeron antes de acabar junto al nacimiento del río Genal, un manantial que surge de las entrañas de las rocas, con abundante caudal donde han colocado junto a él, una especie de área recreativa, donde aprovechamos para comer.
En principio, tras el aporte energético, tocaba regresar hacia Parauta describiendo una circular, pero comenté si alguno quería conocer la cueva de la Excentrica, que se hallaba muy próxima a ese enclave y les tocó la curiosidad a alguno de ellos.
Remontamos un corto trecho de carretera, como si saliésemos de la población, dirección a Ronda. Pasada la piscina y el campo de futbol que dejamos a nuestra izquierda, cuando la carretera se disponía a realizar una cerrada curva, tomamos a nuestra derecha por un carril que en empinada pendiente subía ladera arriba. Como si nos dirigiéramos hacia la Cruz y el cerro de la Fuensanta.
Se trató de veinte minutos de fortísima pendiente, de hecho, no todos continuaron, pero los que tuvimos más interés, dimos con la boca de la cavidad.
Nos metimos dentro haciendo uso de frontales y llegamos hasta un gour colmatado de agua, antesala del hueco por el que habría que introducirse para pasar al laguito con los diferentes espeleotemas.
Se trató de una experiencia nueva para algunos compañeros que salieron muy contentos de ella.
Regresamos por nuestros pasos, hasta la surgencia, recorrimos de nuevo, las calles de Igualeja, pero esta vez, salimos de la población por el Oeste y no por el Norte, por donde entramos a la ida.
Cruzamos el arroyo de Hiladero, pasando entre fincas de los vecinos, dejando a nuestras espaldas, progresivamente más alejada la población, dirección hacia los Benitos, donde cogimos el Camino de Cartajima. Pasamos próximos al cerro Garduña y volvimos a cruzar el camino de Halda por la Loma de Igualeja, pero por un punto diferente al que lo hicimos a la ida.
Una vez terminado el ascenso por el claro carril, con preciosas vistas sobre Cartajima y sus Riscos, que veíamos de forma difusa, ya que estaban tomados por la niebla, nos tocó una severa bajada hacia el valle por donde discurría el río Genal, alineados con Cartajima y con el Camino de Igualeja que partía de esa población.
Al final del descenso, próximos al río, se volvió incluso resbaladiza, ya que trochamos el carril y el firme era tierra húmeda y muy inclinada.
No hubo necesidad de vadear el cauce, aunque yo lo hice por despiste, y eso que me costó lo suyo, para no mojarme y encima doble.
Comenzamos la última subida, el ascenso hacia Parauta, por la estribación, a cuya izquierda, al Oeste, discurría el arroyo de Algorma, por el Camino del Molino.
Pasamos junto a la Cruz del Castañar, por la zona de la Manzanera y poco a poco nos fue cogiendo la noche.
Pasamos junto a la fuente de Abajo, el carril de tierra se convirtió en hormigonado y fuimos entrando en la población por el Suroeste. Sólo nos quedó recorrer alguna de sus calles hasta alcanzar los coches.
DATOS DE INTERÉS DE LA RUTA:
Si quieres el track de la ruta, pincha sobre el siguiente enlace:
https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/circular-entre-parauta-e-igualeja-74349911
NOTA:
Con este
blog solo quiero dejar constancia de algunas de las salidas que hago,
normalmente acompañado de mis amigos, por las Sierras por las que me muevo.
Sólo pretendo aportar mi experiencia personal, en el momento puntual de
realizar mis itinerarios, que como comprenderéis pueden ser cambiantes en
cuanto a climatología y estaciones del año y no es mi intención que las
explicaciones, comentarios y fotos que acompañan a cada una de las entradas de
este blog sirvan de guía para otros montañeros, ya que no tiene por qué ser ni
la mejor opción de ruta, ni las mismas condiciones del tiempo, ni tampoco los
tiempos empleados.
Deseo que os guste, sea de vuestro
agrado y os sirva la información.
Gracias por vuestra visita.
