sábado, 8 de agosto de 2020

CIRCULAR DE SUBIDA AL TORRES DESDE LA RAYA. PUERTO DE SAN ISIDRO

 

Ruta realizada el día 30 de Julio del 2016.

Fuimos Mª José y yo, Antonio.

Otro año más en Asturias, en esta ocasión siguiendo la orientación del pequeño libro "Las 100 montañas más guapas de Asturias" y de donde tomé los diferentes picos a realizar en esta escapada. Ya sólo me quedan unos noventa y tantos por completarlos, je, je... es broma, con los realizados en estos días y los ya convenientemente pisados en otras temporadas, he podido tachar un cierto número de ellos, aunque algunos en particular, dudo mucho que los encumbre.

Nos hospedamos varias noches en el tranquilo, pequeño y precioso, pueblo leonés de Cofiñal, en la Casa de la Picota, donde estuvimos muy a gusto y nos atendieron amablemente, además de tratarse de una limpia y coqueta habitación.

De Cofiñal, nos dirigimos hacia Puebla de Lillo, de aquí, a Isoba y de este último, a San Isidro, dejando el vehículo en el Puerto de San Isidro, justamente en el aparcamiento de la Raya.

Con mochilas a la espalda y botas de montaña en los pies, iniciamos nuestra primera ruta por terrenos fronterizos entre las dos provincias. Al principio por zona leonesa, para terminar en la asturiana y siempre con la intranquilidad que me producen estos picos del Norte, que en cualquier momento, te puedes encontrar con algún paso delicado.

Cruzamos la carretera al otro lado del aparcamiento y rápidamente dimos con un sendero que entre las escobas o piornales nos iba internando entre ellas.


Tomamos rápidamente cierta altura sobre la carretera y al cabo de un rato tuvimos las primeras vistas sobre el objetivo del día, un pico triangular esbelto.

A medida que lo íbamos teniendo más cerca, más inexpugnable parecía.

Tengo que advertir, desde mi punto de vista, que la subida al Torres, no siendo de una alta dificultad, si hay que prestar mucha atención en la subida a la cumbre, ya que un tropezón o mal paso, puede generar consecuencias muy graves, vamos, que hay que subir con pies de plomo y bastante concentrado.

A la altura de los Collados de la Raya, comenzamos a salir del piornal, con la cresta que une el Torres con el Valmartín frente a nosotros y hacia donde debíamos dirigirnos para subirnos sobre ella. Abajo y algo al Suroeste, nos quedaba la Majada Torres, una casa en ruinas rodeada de un buen número de caballos.



Comenzamos a caminar por un estrecho sendero que entre matorral de bajo porte nos iba subiendo hacia la divisoria de cumbres de esa cordal,  por su falda Sur, hasta que nos dejó en su parte superior, justamente antes de una elevación intermedia, situada inmediatamente al Este del Torres. La flanqueamos por el Sur, intentando mantener la cota, aunque siempre en ligero ascenso.




Una vez en la larga cresta del Torres y siempre por claro sendero, pasamos el Collado de la Ventanona, para enseguida, alcanzar la propia Ventanona, un hueco natural calizo, en forma de ventana circular que te permitía asomarte hacia la otra ladera de la cordal. Desde allí tenías vistas hacia el Norte y hacia el Sur, a la vez.








Ya sólo nos quedó seguir el trazado de un sinuoso sendero, que mediante diferentes zigzag iba subiendo por la escarpada cresta, con algún que otro paso donde no podías tener un mal paso o te ibas muchos metros para abajo.

Pero con precaución, se iba ascendiendo por este vertiginoso senderillo, que por cierto, ideal para fotografiar a tu compañero de cordada, con unas perspectivas estupendas.











La senda perdió la pendiente inicial, se hizo más tumbada y enseguida encumbramos. El pico estaba a reventar, durante la subida nos pasaron dos parejas que iban como balas y parte de un numeroso grupo que iba muy disgregado, en el hito cimero nos dimos cita todos, había que pedir la vez para fotografiarse en el poste geodésico, pero gente muy "guapa", como dirían los asturianos. Tuvimos un prolongado tiempo de charloteo en la cumbre, gozando de las magníficas vistas que desde esta atalaya disponíamos.







Pero tocó partir. Ya contentos con el deber realizado, pisar el Torres, el primero de los varios picos que pretendíamos realizar en Asturias, retornaríamos realizando una circular, por conocer otro terreno diferente.

Bajamos hacia el Norte y recorrimos un corto trecho muy pendiente, de la cordal que lo une al pico Fueyos, con dirección al Collado Almagrera, hacia donde se dirigían todos nuestros compañeros improvisados que tuvimos que conocer en el hito cimero.




Fue espectacular la vista de todos ellos alineados, unos tras otros, cuando nos retiramos de esa trayectoria inicial  de bajada y echando una mirada atrás, se veía el perfil de la cordal que descendían y ellos progresando sobre la misma.

Toda la parte Norte al pico Torres estaba cubierta por un mar de nubes y se observaba claramente cómo iba ascendiendo progresivamente hacia nosotros, con el temor que en el regreso, nos cubriese.

Siempre por claro sendero, fuimos circunvalando al pico por el Norte, para ir envolviéndolo por el Oeste hacia el Collado Valverde, una vez en él y viendo que nuestra primera ruta iba llegando a su fin, decidimos ampliarla algo más y decidimos subir al pico Valverde, , que divisábamos hacia el Sur, desde el Torres. Un pico que nos llamó la atención, además de los buenos comentarios que nos hicieron nuestros compañeros anteriores con los que coincidimos en la cumbre.



Realizamos el ascenso de forma intuitiva, sin apoyo de track, aunque siendo observador y teniendo algo de experiencia en la montaña, no nos resultó difícil buscar una buena alternativa de subida, aunque esta elevación mostraba varios farallones rocosos verticales, que había que sortear.

Una vez alcanzada nuestra segunda cumbre del día, no nos detuvimos mucho tiempo en ella, las fotos de rigor y una rápida contemplación de las vistas que desde ella obteníamos, ya que vimos que el mar de nubes continuaba subiendo y se acercaba rápidamente al Collado Valverde.






Bajamos por el mismo de subida, hasta alcanzar el citado Collado y por un claro y marcado sendero, caminamos por la ladera Sur del Torres, dejando al Sur nuestra, La Hoya, una especie de cabecera o circo con pendientes muy pronunciadas.

Esta senda nos condujo a un nuevo collado, en esta ocasión, el comprendido entre el Torres y el pico La Capilla, situado al Sur del principal y al Este del Valverde. Desde aquí y en continuo descenso, nos llevó muy próximo a la Majada Torres, aunque no nos acercamos a ella. Pasamos al Sur del collado de La Raya y algo más al Norte del arroyo Vallina, hasta llegar a conectar con el tramo de ida que realizamos de subida por la mañana, pero al poco, tomamos una clara dirección Sur, abandonando la de ida, para acabar por la trasera de las casas situadas enfrente del enorme aparcamiento del Puerto de San Isidro.






Por sorpresa, nos encontramos que una de ellas, era un bar que llevaban dos simpáticas mujeres, donde nos tomamos una sidra y cervezas. Durante este intervalo de tiempo, se puso a llover y con esta climatología, terminamos en el coche y acabamos esta preciosa ruta.




DATOS DE INTERÉS DE LA RUTA:




Si quieres el track de la ruta, pincha en el siguiente enlace: